El presente juego de diapositivas
está dirigido a los países de Latinoamérica y el Caribe que se
encuentran expuestos a diferentes amenazas naturales. Pretende
ser un instrumento para la difusión y capacitación sobre los aspectos
básicos de la mitigación de desastres en los servicios de agua
potable y alcantarillado sanitario.
Se tratan en particular los
aspectos relacionados con el impacto y las medidas de mitigación
de desastres en este tipo de sistemas. Es una serie que se complementa
con la publicada anteriormente por la OPS/OMS titulada Mitigación
de desastres naturales en sistemas de agua potable y alcantarillado
sanitario Guías para el análisis de vulnerabilidad.
Está dirigido a los
profesionales y técnicos involucrados en el diseño, construcción,
mantenimiento y administración de sistemas de agua y saneamiento.
Su objetivo es promover y facilitar la incorporación en esta infraestructura
de medidas de mitigación frente a desastres naturales, para reducir
los daños y asegurar el mantenimiento de los servicios con posterioridad
a un posible desastre
Introducción
El presente material de capacitación,
sin llegar a tratar de manera exhaustiva las diferentes variables
que influyen en la reducción de la vulnerabilidad de los sistemas
de agua potable y alcantarillado sanitario frente a amenazas naturales,
busca abordar el contenido que se presenta en la diapositiva
1.
Generalidades
sobre los desastres y su impacto en los sistemas de agua y saneamiento
(diapositiva
2)
América Latina y el Caribe
es una región expuesta a todo tipo de amenazas naturales: sismos,
huracanes, erupciones volcánicas, inundaciones deslizamientos
y sequías, entre otros, como se muestra en la diapositiva
3, las cuales se presentan con cierta frecuencia en nuestros
territorios y dejan a su paso pobreza y destrucción.
Los resultados de los últimos
desastres han demostrado el incremento de la vulnerabilidad provocada
por la acción del hombre, ha aumentado la frecuencia y el impacto
de los desastres. Entre otras consecuencias, los servicios de
agua y saneamiento se ven seriamente afectados, lo que influye
de manera negativa sobre la salud y el bienestar de la población.
Las razones para proteger
los sistemas de agua y saneamiento frente a desastres naturales,
van desde la protección de la salud hasta asegurar la inversión
de las instituciones del sector de agua y saneamiento (diapositiva
4).
La interacción entre las
amenazas naturales y los sistemas de agua y saneamiento ha dejado
en evidencia cuán expuestos se encuentran éstos a ser dañados.
Además, generalmente en los procesos de desarrollo no se ha considerado
el efecto de los desastres sobre estos sistemas, lo que se ha
traducido en:
- Pérdidas económicas para las empresas
de agua (diapositiva
5 ) (diapositiva
6)
por los cuantiosos daños directos e indirectos que generan los
desastres en los sistemas. Los daños directos están asociados
a los daños físicos en la infraestructura. En cambio, los daños
indirectos están asociados al costo adicional que incurre la
empresa para atender la emergencia y a la falta de recaudación
debido a la interrupción de sus servicios, entre otros.
- Estudios posteriores al sismo de Limón,
Costa Rica, ocurrido en abril de 1991, comprobaron que si se
hubieran desarrollado las medidas de mitigación y prevención,
se habría invertido cinco millones de dólares y no se hubieran
gastado los nueve millones que costaron las tareas de emergencia
y rehabilitación, lo que hubiera significado un ahorro de 4
millones (diapositiva
7).
- Alteraciones en la calidad de los servicios
y exposición a riesgos para la salud debido al deterioro de
la calidad de los mismos. (diapositiva
8).
Cuando un desastre daña seriamente
los sistemas de abastecimiento de agua se ve claramente cómo se
deteriora la salud de la población, como por ejemplo a través
del drástico incremento de enfermedades diarreicas agudas (EDA)
y de otras enfermedades de origen hídrico (diapositiva
9).
En la diapositiva
10 se enumeran algunas de las razones por las cuales
los sistemas de agua potable y saneamiento son especialmente vulnerables
a amenazas naturales. Estas van desde la extensión y características
físicas de los sistemas, hasta la importancia del agua durante
la atención de la emergencia.
La única manera que esta
infraestructura se encuentre preparada para situaciones de desastres
es mediante la aplicación de medidas de prevención y mitigación,
las que permiten reducir la vulnerabilidad de los sistemas. Muchas
veces, la vulnerabilidad comienza con la inadecuada ubicación
de los componentes (diapositiva
11).
Cuando un determinado componente
no puede ser ubicado en zonas seguras, su diseño y construcción
debe exigir la implementación de obras de prevención a fin de
asegurar su funcionamiento en condiciones extremas. En la diapositiva
12se detalla la construcción de un muro de contención
para la protección de una estación de bombeo contra deslizamientos
que estaban afectando a la misma.
Si por alguna razón no se
pudieran implementar medidas de mitigación, es necesario conocer
la vulnerabilidad de los sistemas y sus componentes frente a las
distintas amenazas a fin de realizar los preparativos para responder
en situaciones de emergencia. La disponibilidad de compuestos
químicos diapositiva
13 y un almacén mínimo de repuestos clave previamente
identificados, serán de gran utilidad para responder de manera
efectiva y eficaz ante la emergencia.
A fin de no repetir los mismos
niveles de vulnerabilidad que quedan en evidencia luego de un
desastre, es importante establecer las medidas de prevención en
las diferentes etapas de rehabilitación y reconstrucción.
En las tares de rehabilitación
y reconstrucción se deben incorporar medidas de prevención vitales,
como cambios de material, de ubicación o de trazado, a fin de
reducir la vulnerabilidad del componente (diapositiva
14) y de no repetir o incrementar las vulnerabilidades
que dejó en evidencia el desastre.
Una de las peculiaridades
de estos sistemas es que cada componente podría estar expuesto
a diferentes amenazas. Por esa razón, se deben realizar acciones
para atender cada una de las vulnerabilidades identificadas (diapositiva
15). Esta
diapositiva tiene animación automática y tarda un minuto en ser
presentada; en la misma se presentan los efectos de distintas
amenazas sobre diferentes componentes típicos de un sistema de
agua, con lo cual se quiere graficar que no todos los componentes
de estos sistemas serán afectados por una misma amenaza natural.
Gestión
del riesgo (diapositiva
16)
La vulnerabilidad está asociada
a la peligrosidad e intensidad de los eventos y a las características
de un determinado componente. Si bien no se puede modificar la
amenaza, se puede reducir la vulnerabilidad para minimizar los
daños y mejorar la respuesta durante la emergencia. Para reducir
los daños es necesaria la gestión del riesgo; se considera que
el riesgo mantiene una relación directamente proporcional con
la amenaza y la vulnerabilidad del componente analizado (diapositiva
17). Por ende, para reducir el riesgo necesariamente
hay que disminuir la amenaza o la vulnerabilidad.
Cuando las amenazas naturales
afectan los sistemas de agua y saneamiento, sean existentes o
por construir, se busca reducir los efectos mediante la ejecución
de medidas de prevención o mitigación. Dichas medidas se determinan
a partir de un análisis de vulnerabilidad de los distintos componentes
frente a las amenazas a las cuales se encuentran expuestos.
En la diapositiva
18 se detalla la medida de mitigación implementada
en una línea de conducción. Luego de realizar el estudio de vulnerabilidad
frente a sismos, se determinó la necesidad de ampliar su base
de apoyo a fin de aumentar su seguridad y, consecuentemente, reducir
el riesgo a verse afectada frente a este tipo de fenómenos.